El Equilibrio entre la Vida Laboral y Personal …un reto para estudiantes en prácticas
Para muchos estudiantes, el paso de la educación superior al mundo laboral representa una nueva etapa llena de aprendizajes, desafíos, emociones y oportunidades, convirtiéndose en una etapa importante de su vida laboral, porque por un lado comienzan a construir una carrera y por otro se encuentran bajo una presión mayor, ya que deben estar a la altura de las expectativas, sobresalir y gestionar un ritmo de vida diferente.
Cuando te incorporas a una empresa, institución u organización a realizar la práctica profesional o laboral, no sólo deberás aplicar los conocimientos adquiridos durante tus estudios, sino que también afrontarás nuevos retos, te deberás adaptar al entorno laboral, aprender a gestionar el tiempo y sobre todo, mantener un equilibrio entre la vida laboral y la personal.
Debido a los constantes esfuerzos por demostrar las habilidades en este nuevo entorno, para los estudiantes en práctica, lograr el equilibrio entre la vida personal y laboral puede ser un desafío, ya que en algunas oportunidades significa jornadas de trabajo extendidas, menos tiempo de descanso y renunciar a actividades personales o sociales. Sin embargo, es posible aprender a equilibrar estos dos aspectos, además de ser esencial para el bienestar y el éxito profesional.
A continuación te daremos algunos consejos que te ayudarán a mejorar tu equilibrio entre vida personal y laboral en esta nueva etapa de tu vida:
Aprender a definir límites: Como practicante, es tentador decir “si” a todo, pero aprender a establecer límites claros es esencial. Mostrar compromiso siempre es importante, pero trabajar muchas horas puede resultar agotador física y mentalmente. Por lo tanto, para evitar malentendidos y mantener tu energía y productividad, es importante la comunicación con tu supervisor, establecer expectativas claras y acordar su disponibilidad.
Planificar las tareas a realizar: Al integrarse a un nuevo trabajo, es fácil sentirse abrumado por la cantidad de tareas y responsabilidades. Aprender a establecer prioridades y a gestionar el tiempo serán habilidades que el practicante debe desarrollar. Para ello, es necesario identificar y definir las actividades más importantes o urgentes que se completarán primero; también es una buena idea establecer un rango de tiempo para cada tarea…ojo, se realista con la cantidad de tiempo que necesitas para completar una tarea. Estas acciones ayudarán a gestionar tu tiempo y reducir la sensación de estrés.
Aprende a pedir ayuda: Durante la práctica, muchos estudiantes intentan asumir todas las responsabilidades, para demostrar sus capacidades y competencias. Sin embargo, demuestra inteligencia, madurez y profesionalismo para saber cuándo es necesario buscar ayuda.
No descuides el autocuidado: No dejes de lado los hábitos saludables por el trabajo, ya que son esenciales para mantener tu salud, energía, mejorar la concentración y contribuir al equilibrio personal y profesional. Por lo tanto, dormir lo suficiente, mantener una dieta equilibrada, hacer ejercicio o deportes, leer o compartir tiempo con amigos o familia, serán los pilares de este equilibrio y estos momentos de desconexión te permitirán recargar pilas y volver al trabajo con mayor concentración y creatividad.
Iniciar la vida laboral a través de la práctica, es una etapa importante en la vida de un estudiante. Es una oportunidad para crecer, aprender de los éxitos y errores, y descubrir lo que es realmente importante para tu vida. Aunque el camino está lleno de desafíos, mantener el equilibrio entre el trabajo y la vida personal, es esencial para tu bienestar… y no sólo a corto plazo, sino que para toda tu vida.
Utiliza esta experiencia para construir relaciones significativas, desarrollar y reforzar hábitos saludables y fortalecer tus habilidades y competencias. Recuerda, la práctica no se trata solo de demostrar lo que sabes, se trata de un crecimiento integral y cada paso que des, te acercará a convertirte en un profesional y la persona que quieres ser.